Es inevitable no sentir un cariño (muy) especial por Pablo Dapena, un triatleta que nos ha dado muchos titulares felices y el que dio el pistoletazo de salida a este medio de comunicación. Desde hace varias semanas arrastra una lesión debido a una fractura por estrés en el tercer metatarsiano de un dedo del pie, algo que le ha obligado a bajar el ritmo de los entrenamientos, especialmente de la carrera a pie, la disciplina con más impacto para esta lesión. Este contratiempo le ha obligado a tomar la dura decisión de rechazar su presencia en Ibiza, bien en la prueba de la PTO o bien en el Campeonato del Mundo LD, pudiendo tener posibilidades de disputar una de las dos citas de gran importancia.
Cumpliendo con sus responsabilidades sin tirar la toalla pese a la dura situación
Esta semana hemos hablado con Dapena para conocer en qué estado se encuentra su lesión y como continúa compaginando vida personal y profesional después de que fuera padre hace poco más de un año. Todo se resume en un «Conciliando familia, entrenamientos, trabajo y responsabilidades», algo que vive la gran mayoría de triatletas populares de nuestro país, pero una preocupación más grande para alguien que es profesional y el descanso junto con el entrenamientos son sus jornadas laborales. «Cuando duermes y descansas menos es más fácil caer por lesión. Al final todo pasa factura», reconoce Dapena.
La evolución de su lesión
«Ahora mismo llevo 8 semanas. La semana pasada andando y corriendo y este pasado domingo corrí 10-12 kilómetros muy suaves de manera continua», nos comenta un Dapena que, en las épocas en que las lesiones le han respetado, nos ha regalado unos grandes momentos. Junto con el descanso y la prudencia en los entrenamientos, lo compagina con sesiones de fisio que aceleren la recuperación.
«Al final es una cicatriz y cualquier movimiento o pisada molesta. Estoy en un momento entre andar y correr o correr seguido, pero tengo la sensación de que cualquier movimiento en falso me puede hacer ir para atrás. Y esto también es un peligro porque cambias la pisada, vas más raro, etc. Siempre para proteger una zona comienzas a desproteger otra al no correr de manera natural», asiente el doble medallista mundial.
Challenge Gdansk
Si bien asume que «lo primero es estar sano para luego poder estar en forma y así estar preparado para competir», Dapena mantiene las esperanzas de poder ir recuperándose positivamente las próximas semanas para así poder afrontar con garantías una segunda parte de la temporada que le pueda dejar algunas prueba para competir. Una de ellas que tiene en mente es el Challenge Gdansk (Polonia), cita que se celebrará el próximo 18 de junio y para la que Dapena se encuentra a dos meses vistas.
Desde Objetivo Triatlón desear la máxima de las suertes y una pronta recuperación a Dapena. ¡Quedan muchas alegrías por delante, Pablito!
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