El sábado por la tarde se disputó el Campeonato de España de Triatlón de Media Distancia en Salamanca. Si bien el calor no apretó al ser un fin de semana ‘revuelto’ en Castilla y León, aún así las temperaturas eran altas con máximas de 31º y algunas rachas de viento que aumentaban la sensación térmica y la humedad de la zona.
¿Deben suspenderse las pruebas o buscar horarios alternativos?
En 2022 ya se abrió el debate de la cancelación de pruebas por altas temperaturas donde hablamos con Jorge García, director de competiciones de la FETRI hace exactamente un año para que nos comentara como afrontan la decisión de suspender o no una prueba por las temperaturas; este 2023 también se prevé caluroso y muchas más pruebas estarán en la tesitura de Salamanca.
Si bien muchos triatletas se aquejaron por los problemas físicos a causa del calor, fue en la prueba élite femenina uno de los casos más sonados, ya que la que lo sufrió en sus propias carnes fue Laura Gómez, una de las triatletas que estaba luchando por el título de la prueba hasta el momento en el que se tuvo que retirar y ser atendida por los sanitarios de la prueba. Si en algunas ocasiones podemos pensar que estas situaciones las padecen más otros deportistas por diversos motivos como la falta de entrenamiento, no es así en la triatleta catalana que de ello va sobrada (y viviendo en una zona con temperaturas más altas durante todo el año).
Laura Gómez reabre el debate tras el susto sufrido en Salamanca
Tras bajarse en cabeza de carrera a afrontar la media maratón final, Laura no tardó muchos kilómetros en comenzar a vivir ese golpe de calor que la obligó a retirarse, ser atendida por los servicios médicos de la prueba y ser trasladada al Hospital de Salamanca donde permaneció en observación hasta las 23h., momento en el que los valores de su cuerpo volvieron a su estado normal.
Mientras aprovechaba la ocasión a dar las gracias a los servicios médicos por su atención, la catalana abría una vez más el melón sobre si es sano o no para los deportistas competir bajo estas altas exigencias climatológicas o no, quedando esta situación a un debate que ofrece diversos puntos de vista: «Contenta de no haber lamentado daños mayores. Ofrezco mi experiencia vivida para reflexionar sobre las condiciones a las que estamos expuestos los atletas en este deporte tan querido por todos».