La Isla Guernsey, situada en el mítico Canal de la Mancha frente a las costas de Normandía, ha sido el escenario del primer Triatlón post confinamiento del mundo entero. La prueba se disputó bajo las distancias de 400 metros de natación, 10 kilómetros de ciclismo y 3 kilómetros de carrera a pie; buscando así estar en contacto el menor tiempo posible y limitándose la misma a 60 participantes.
LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD DE LA PRUEBA
El Covid-19 ha generado cambios en el modo de vida de todos los ciudadanos y los deportistas no son una excepción. Esta vez, además de las normas propias de la competición. Entre las medidas impuestas se encontraron:
- Toma de temperatura a todos los participantes.
- Salida tipo contrarreloj de un minuto de diferencia entre cada participante.
- El mayor contacto físico debía producirse durante los adelantamientos, y dejando la mayor distancia posible.
UN PRIMER ‘TEST’ CON ÉXITO
Los organizadores finalizaron con buenas sensaciones la prueba en un lugar que llevaba mes y medio sin reportar ningún caso positivo de COVID-19. El comité organizador destacó la felicidad y emoción de todos los deportistas.