Hasta ahora predominaban entrevistas a deportistas. Está claro que son el epicentro del espectáculo, pero, cerca y a la vez lejos de ellos, se encuentran otras muchas personas que desde su perspectiva trabajan para hacer crecer nuestro humilde deporte, y que sin ellos tampoco sería posible: entrenadores, oficiales, federaciones, organizadores y también entre ellos… ¡presidentes!
Os presentamos a Amancio del Castillo Serrano, presidente de la Federación de Castilla y León de Triatlón. En esta entrevista divida en dos entregas resolvemos varios de los temas que más dudas siembran entre los deportistas…
1. Empecemos por el principio. ¿Cómo llega Amancio del Castillo a ser presidente de una federación territorial de triatlón?
Me eligieron de presidente a finales de 2008, una vez que el presidente anterior ya había decidido dejarlo hacía tiempo y no había nadie dispuesto. Yo era deportista, oficial, organizador y llevaba un año como delegado de Segovia. La Federación era mucho más sencilla de lo que es ahora y me convencieron argumentando que no llevaba mucho trabajo el dirigirla.
2. ¿Cómo valora esta temporada que acaba y que novedades se presentan para el año 2018?
Suelo dividir la Federación en varios apartados aunque el funcionamiento y el fin sean los mismos.
A nivel de Competiciones hemos consolidado el número de pruebas, ya que veníamos de un crecimiento exponencial y tampoco se correspondía con la realidad. Tenemos un gran calendario, pero toca empezar a dar mayor calidad a las pruebas y seguir creciendo en provincias en las que tenemos menor presencia.
Respecto a la Tecnificación, hemos conseguido crear un Centro Nacional de Tecnificación de referencia. Posiblemente es lo que más trabajo da a la Federación, pero creo que apostar por la formación de deportistas jóvenes es la base del deporte de alto rendimiento donde somos una Comunidad con apenas deportistas internacionales respecto a otras, aunque el camino es largo y los frutos se recogen tarde.
El deporte de categorías menores, sigue siendo el caballo de batalla. Es cierto que cada vez más clubes se embarcan en crear escuelas, pero es muy difícil y el calendario de competiciones es también muy reducido, por lo que le toca a la Federación invertir en ello.
Y a nivel interno de funcionamiento: oficiales, secretaría, comunicación, contabilidad… cada vez se trabaja mejor y cada vez hay más gente con las funciones más definidas aunque tenemos que seguir mejorando. Se ha conseguido profesionalizar la Federación y eso lo noto en que puedo ausentarme un par de semanas y todo sigue funcionando, cosa impensable hace apenas un año. El equipo de trabajo de la Federación cada vez es más compacto y eficaz.
3. Con tu experiencia, tanto triunfal como perdiendo, ¿crees que el proceso de elección de un presidente federativo es justo?
Experiencia triunfal tengo poca, ya que en los tres procesos electorales que he pasado no he tenido oposición nunca. Eso puede significar que toda la gente está muy contenta, cosa que dudo, o que la gente pasa de meterse en líos, ya que al final pierdes parte de tu tiempo. Es una pena no haber tenido contrincante nunca porque la competencia nos hace mejorar, aunque también tiene el lado negativo, que en toda batalla pierden los dos bandos y perdería el triatlón. Esto es lo que aprendí en mi experiencia como perdedor en las elecciones nacionales, y también aprendí que desde dentro se pueden cambiar más cosas que desde fuera.
¿Si el proceso es justo? Creo que lo es sobre el papel porque hay unas normas escritas iguales para todos. Lo que corrompe la elección no es el proceso, sino el dinero. Cuando aparecen intereses económicos, acaban desapareciendo los intereses deportivos y todo vale, pero pasa en cualquier ámbito de nuestra sociedad. Otra cosa distinta es si deberían ser las Federaciones, entidades con funciones públicas y privadas a la vez, las que deberían dirigir el deporte en nuestro país con tanto poder. Quizás un mayor control a partir de ciertos niveles económicos evitaría la corrupción que se mueve en el mundo del deporte.
4. Desde que has llegado a ser presidente territorial, ¿Cuál consideras que es el mayor avance, y cuál es tu espina pendiente?
Mi primera propuesta cuando entré fue profesionalizar la Federación, y de momento es el reto que creo que he conseguido. Aunque otra cosa que veía inalcanzable era la de tener un Centro de Tecnificación en funcionamiento, y aunque nos da mucho trabajo y quebraderos de cabeza, lo estamos consiguiendo.
Una espina pendiente es el deporte de menores, que no la única. Mi ilusión en el futuro sería ver a todos los clubes de Castilla y León con escuelas y en todas las provincias, pero es un trabajo que no está valorado y hay muy poca gente que se implique. Somos una Comunidad complicada por nuestra extensión, por nuestra baja densidad de población y por la disponibilidad de piscinas cubiertas localizadas solo en las grandes ciudades, lo que nos limita, pero tenemos que luchar por implantar escuelas en toda la geografía ya que serán los futuros triatletas. Nuestra pirámide de licencias está dominada por los veteranos y tenemos que luchar por invertirla.
5. Brevemente. Actualmente ser presidente de la FETRI es…
Agua pasada que me costó mucho a nivel personal…
Desde Objetivo Triatlón agradecer a Amancio del Castillo su predisposición para realizar esta entrevista. En breve… ¡segunda parte!