Donde hay problemas siempre surgen oportunidades y ganas de beneficiarse de ellos. Por ello, la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) ha lanzado un comunicado dirigido a todos los deportistas, tanto populares como profesionales, para decirles que no aprovechen la crisis mundial del COVID-19 para doparse. Esto surge después de que varios países comunicaran que sus agentes no pueden salir a hacer controles y que se han reducido considerablemente los presupuestos dirigidos a la lucha contra el dopaje en todo el mundo.
«El COVID-19 no es un espacio para que los atletas hagan trampas. No deben pensar que es hora de hacer trampas. Todo lo contrario, las agencias antidopajes tienen armas para atraparles», aseguró Wiltod Banka, presidente de la AMA desde el pasado mes de enero.
«Los controles no son nuestra única arma y tenemos otras más fuertes. Existe el pasaporte biológico que es una herramienta útil para detectar casos de dopaje y también se pueden practicar análisis a largo plazo de las muestras. También se mantiene la obligación de que los deportistas revelen su paradero, aunque no podamos ir a comprobarlo», indicó.
Banka admitió que la prioridad número uno mundial actualmente es la lucha contra el nuevo coronavirus: «Con la vida de las personas en juego como consecuencia del COVID-19, el deporte pasa a un segundo plano. La lucha contra el dopaje no es tan importante como la vida de las personas», señaló.