Los controles antidoping continúan visitando a nuestros triatletas durante su pretemporada (ya para algunos plena temporada).
Es habitual entre los deportistas que publiquen en sus redes sociales que les han visitado “los vampiros”. Estas mismos publicaciones siempre suelen ir acompañadas de duras críticas contra esta lacra, algo que sin duda los honra.
Esta semana varios ejemplos, como por ejemplo el de Raúl Amatriain, un asiduo de estos controles. El navarro se somete a gran cantidad de estos controles sorpresa, como el que recibió este pasado lunes. Nos daba a conocer a través de sus RRSS que había recibido un nuevo control, dándole un toque de humor: “Pues nada, yo aquí sigo a lo mío. Año nuevo, mismas costumbres. Hay amigos que visitan mucho menos”.
Otro ejemplo que nos llega esta semana viene de manos de uno de los mejores triatletas españoles de la actualidad, el catalán Nan Oliveras. En el día de ayer, los trabajadores de la Agencia Española antidopaje le visitaban a las 7 de la mañana en su casa. Aprovechaba la ocasión para animar a todos a poner su granito de arena en la lucha contra el dopaje por un deporte sin tramposos. Oliveras se postula en el lado de “Sanciones de por vida”, sin segundas oportunidades para los tramposos. Sin ninguna duda es de admirar que un PRO critique duramente el dopaje. Mucho deberían de tomar ejemplo y ayudar a esta noble causa.
Algo más “heavy” son casos como el que también recibió Paula García Godino el pasado lunes. La madrileña se sometió al control en el Hospital donde su hija permanecía ingresada de urgencia. La misma Paula aviso de que esos días “su residencia” sería el hospital por motivos familiares, y, aun así, allí se personaron para realizarla el control antidoping, al que “la diablilla” se sometió sin ningún problema.